Por Beatriz Alonso

¡En Design for Change España estamos de enhorabuena! Celebramos la incorporación al equipo de Alicia Sánchez, responsable de Estrategia y Alianzas. Un perfil que se define a sí misma como una “conectora nata, una exploradora de oportunidades en todas las facetas de mi vida. Curiosa, sociable, creativa, viajera, cabezota, madre, psicóloga e intraemprendedora, conectando pasión y profesión al borde de los 50 (o sea, en un momento fantástico para iniciar un nuevo camino)”, comenta con una de esas sonrisas que traspasa mascarillas.

Licenciada en Psicología de las organizaciones, Alicia inició su carrera profesional en el área de los RRHH y pronto se lanzó al mundo del emprendimiento en diferentes sectores, donde ha estado inmersa durante casi 15 años. Especializada en gestión empresarial, desarrollo e implementación de proyectos y alianzas estratégicas, decide dar un giro a su trayectoria y poner toda esa experiencia al servicio de proyectos con impacto positivo.  Entonces se involucra de lleno en el campo de la innovación social, el desarrollo sostenible y la Agenda 2030 como marco de trabajo global, formándose, generando redes y colaborando con diferentes organizaciones e iniciativas, algunas de ellas directamente vinculadas a niños, niñas y jóvenes en el ámbito educativo (formal y no formal). 

Hoy llega a Design for Change España a poner todas sus ganas e ilusión para impulsar la estrategia y generar alianzas. 

Por Beatriz Alonso

PREGUNTA: Para ir entrando poco a poco en detalles, ¿cómo conoces Design for Change (DFC)?

RESPUESTA:  Durante mi colaboración con Ashoka, en el área de Educación y Juventud. DFC España es una organización amiga de Ashoka y totalmente alineada, con la que se había firmado una alianza. Recibí muy buenas referencias de su trabajo y del equipo.

P: ¿Cuál es la primera impresión que te provoca DFC?

R: Hace tan solo unos 3 meses, mientras estaba pensando en invitar a participar en el evento #MañanaEmpiezaHoy a alguna organización referente en educación transformadora y empoderamiento infanto-juvenil, recordé a DFC España y quise saber más.

Entonces empecé viendo la famosa entrevista a su fundadora, Kiran Bir Sethi, para el proyecto educativo “Aprendemos Juntos” de BBVA y realmente me removió. Seguí profundizando en todo el trabajo que se desarrolla en DFC y conecté absolutamente con las inquietudes y con el propósito de la organización. Admiro la convicción, la valentía y la perseverancia de una mujer que no se limitó a quejarse de un sistema, sino que pasó a la acción desde lo que estaba a su alcance. Hoy ha convertido su inconformismo en un movimiento internacional que lleva 20 años transformando la educación.

P: ¿Dónde ves el potencial y el diferencial de la organización?

R:  Destacaría cuatro puntos principales. DFC España:

  • Lleva en su ADN esa misma convicción, que se refleja en la pasión y el compromiso del equipo, y se transmite en cada proyecto, en cada taller. Esto, unido a su talento y experiencia, ya es realmente potente y diferencial.
  • Tiene un propósito que se sustenta en una metodología absolutamente testada, eficaz, dinámica, flexible y adaptable a cualquier ámbito. Un modelo de aprendizaje experiencial que lleva a la acción y que realmente sitúa a esos niños, niñas y jóvenes como agentes capaces y necesarios, poniendo en valor su talento en el desarrollo e implementación de soluciones a retos diversos, sin posponer su papel a acciones futuras, porque: “No son el futuro, son el presente”.  Además, abre infinitas posibilidades de aplicabilidad más allá del ámbito educativo, hacia diferentes sectores y públicos.  
  • Forma parte de una gran red internacional/comunidad que aporta un enorme valor añadido, generando intercambios de experiencias, aprendizajes compartidos, una visión global, una gran visibilidad y unas posibilidades de colaboración para afrontar proyectos a mayor escala.
  • Y, por supuesto, existe un enorme potencial en la generación de alianzas y desarrollo de proyectos colaborativos con todo tipo de entidades alineadas, aportando ese valor diferencial y optimizando capacidades, esfuerzos y recursos compartidos. Así, es posible llegar más lejos y multiplicar el impacto: Identificar y aterrizar esas sinergias, muchas veces improbables y donde todos ganan; generar redes y no sólo reforzar posicionamiento en terrenos conocidos, sino explorar nuevos “océanos azules”.

P: Con tu experiencia y saber-hacer, ¿qué vas a aportar al equipo?

R:  Una visión externa y quizá más amplia del mercado y sus posibilidades, que nace de una experiencia multidisciplinar y multisectorial. Una nueva mirada. El día a día suele absorbernos y, a veces, ”los árboles no nos dejan ver el bosque”. En este momento global de cambio acelerado y de incertidumbre, creo que es importante reconectar con nuestro para qué y repensar hacia dónde queremos ir, analizando el camino andado (para reafirmarlo o valorar nuevas rutas) y aterrizándolo en un plan estratégico ágil y dinámico.

Concretando aún más, la planificación estratégica y la generación de alianzas implican una inversión de tiempo y recursos que muchas veces no se entiende como prioritaria. Celebro y valoro que el equipo de DFC España reconozca su necesidad, apueste por ellas y, además, haya confiado en mí para impulsarlas.

Creo firmemente que el futuro de esta, y de cualquier organización, pasa por potenciar la colaboración al máximo, trabajar en red, caminar de la mano de otros eligiendo bien los compañeros/as de viaje hacia metas comunes. Y es un terreno de oportunidades que me apasiona. A lo largo de los últimos años, he podido ir generando una gran red realmente enriquecedora y diversa, que comparte esta visión y, sin duda, será toda una fuente de inspiración y conexión.

P: ¿Dónde se alinea tu propósito con el de DFC España?

R:  En la convicción de que todos y todas tenemos un enorme potencial transformador, pero necesitamos herramientas para desarrollarlo, “espacios” que fomenten su despliegue y aliadas/os que nos acompañen en ese camino. Una convicción en que la educación (en su sentido más amplio) es la palanca de cambio más potente, la base de cualquier transformación social profunda y sostenible.

Si reconocemos y canalizamos adecuadamente todo ese potencial (el I CAN), nos unimos a otras personas y organizaciones (Better Together) y pasamos a la acción, generaremos una ola de cambio imparable. Es una oportunidad ineludible, urgente y absolutamente motivadora.

P: Háblanos de tu hoja de ruta, ¿cuáles son los primeros pasos a seguir?

R:  Estamos empezando por un análisis interno y externo, una comprensión real y compartida de dónde estamos, para definir objetivos a corto, medio y largo plazo. Poniendo en valor el trabajo y experiencia acumulada, afianzando aquello que mejor funciona, optimizando recursos y explorando nuevas oportunidades desde esa visión colaborativa.

El plan de acción, en el que ya estamos trabajando, se basa por tanto en apoyarnos en nuestras fortalezas, no solo para aprovechar esas oportunidades que se nos abren dentro de nuestra zona de confort, sino para ser creativos y proactivas, anticipándonos y generando otras oportunidades más allá. 

Este plan se fundamenta, además, en renovar la ilusión con nuevas iniciativas y proyectos, sin perder nunca de vista nuestra misión y visión, priorizando aquellas más factibles en el corto plazo y disfrutando del camino.

Paralelamente, ya estamos en “modo explorador”, generando conexiones realmente interesantes 😉

P: Para seguir profundizando y concretando, ¿cuáles son tus objetivos?         

R:  Parto de la premisa de que nunca serán mis objetivos, porque solo serán válidos si son consensuados y los hacemos nuestros, remando juntos/as para alcanzarlos 😉 Aunque, a nivel genérico, consisten en:

Reforzar el posicionamiento de DFC España como organización pionera y con peso específico en el ámbito de la innovación educativa, así como su diferenciación.

Priorizar, optimizar recursos y ser efectivos.

Explorar y generar nuevas oportunidades, promoviendo y activando alianzas multiactor sólidas, ilusionantes y donde todas ganamos.

Potenciar nuestra comunidad, estrechando lazos con nuestros stakeholders y haciéndola crecer, enriqueciéndola y apoyándonos en la tecnología.

Poner en valor el enorme potencial y la efectividad de la Metodología DFC, así como su aplicabilidad a diferentes ámbitos más allá del contexto educativo.

Empaparnos de lo que ocurre en el sector y estar atentos a lo que está por venir, ser parte activa, tener mayor presencia en redes, movimientos, plataformas… Compartir experiencias, aprender de otros, estar conectadas.

P: En el momento global de transformación que vivimos, ¿qué puede aportar DFC España a las organizaciones con las que genera alianzas?

R:  Su gran bagaje en el ámbito de la educación transformadora, una marca consolidada y referente en el sector, una comunidad fiel y prescriptora, un propósito firme, un equipo multidisciplinar y comprometido (combinando talento, experiencia, convicción y emoción), el respaldo de una red internacional, una metodología testada y versátil, la posibilidad de poner en valor el potencial y la mirada de niñas, niños y jóvenes en la resolución de retos en ámbitos diversos, su adaptabilidad y la oportunidad de abrir nuevas líneas de exploración (añadiendo valor diferencial a proyectos en marcha o desarrollando nuevas iniciativas)…

P: ¿Cómo suma DFC España para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030?

R:  Nuestra misión incide directamente en la consecución de varias de las metas de diferentes ODS, principalmente del ODS 4, ODS 10 Y ODS 17. Además, a través de proyectos vinculados a la resolución de retos específicos, sensibiliza y acciona a los y las participantes en torno a otros objetivos en los cinco ejes de la Agenda 2030 (planeta, personas, paz, prosperidad y alianzas). Este es, sin duda, un marco de trabajo y un lenguaje compartido para DFC España.

Además, nuestro core está ligado al ODS 4, promoviendo una educación significativa y transformadora (en el ámbito formal y no formal), conectada al ejercicio responsable de la ciudadanía local y global, a los Derechos Humanos, la paz, la inclusión, la igualdad de género, el respeto por la naturaleza y la conciencia sobre el uso y abuso de sus recursos, la salud… La educación es un pilar fundamental de la Agenda, y el ODS 4 es el más transversal: son los cimientos sobre los que construimos la sociedad que queremos ser. Conectado con esto, apostamos por proyectos inclusivos que no dejen a nadie atrás (ODS 10), y por esa generación de comunidad, de red de alianzas y colaboraciones multiactor que optimizan esfuerzos y multiplican el impacto (ODS 17). 

P: Y para terminar, soñemos un poco… ¿Cómo ves la organización en un año? ¿Y en tres?

R: En un año habremos afianzado nuestro posicionamiento en el ámbito de la educación formal y no formal. Además, estaremos involucradas en proyectos vinculados al tercer sector y la empresa privada, aportando ese valor diferencial. Seguiremos abriendo camino en más proyectos europeos y empezaremos a apoyarnos en la tecnología para poner todo su potencial al servicio de nuestro propósito.

En tres años, DFC España será motor de una gran comunidad multidisciplinar y diversa donde se generan conexiones, se desarrollan iniciativas colaborativas y se comparten experiencias y aprendizajes; desde la convicción de que la educación (en su sentido más amplio) es el arma más poderosa para cambiar el mundo.

Mil gracias, Alicia, por poner todas tus ganas, conocimientos e ilusión en la organización; y trabajar para que más personas y entidades se sumen al cambio y unan fuerzas con Design for Change España. 

QUIERO COLABORAR CON DFC ESPAÑA