El prototipado (Haz un prototipo, página 41 del toolkit) es uno de los pasos de la etapa Imagina del proceso DFC, que en general suele causar extrañeza porque no estamos acostumbrados. Uno de los pilares de la metodología “Design Thinking” es “equivócate rápido y barato” y este es uno de los fundamentos del prototipo.

Para nosotros, un prototipo es un “primer ejemplar” de una idea, un paso que acerca la idea a la realidad. Construirlos resulta de gran utilidad para, en primer lugar, comprender mejor la visión que cada persona tiene sobre una idea, y va a ayudar a tus alumnos a definir, de manera mas clara, qué es lo que quieren hacer.

Prototipo 3

Y para entender la necesidad de lograr esta comprensión común, no hay nada como pensar en la palabra “manzana” ¿qué se os viene a la cabeza?

Aquí hay una variedad de posibilidades:

diferentes tipos de manzanas

Pues si con un concepto tan simple hay una amplia variedad de interpretaciones, ¿os podéis imaginar cuando estamos hablando de las ideas de los alumnos para cambiar el mundo?

Existen prototipos muy diversos: dibujos, maquetas, collages… incluso una pequeña representación teatral puede funcionar muy bien. Cualquier cosa que les sirva para que la idea “salte de la cabeza a la realidad”.

Los prototipos deben ser sencillos y útiles, pues la intención no es hacer obras de arte, sino comunicarse entre el equipo y definir mejor la idea.

La segunda ventaja de hacer prototipos, es que cuando hay que contar la idea a alguien para tener su feedback, o para lograr aprobación, es mucho más sencillo si hay una representación de la misma, puesto que ayuda a visualizarlo.

Y la tercera, es que con la realización del mismo, se puede identificar que no es posible avanzar con la idea en su totalidad si bien si es posible en una parte.

¿Te animas la próxima vez que tengan que definir un concepto tus alumnos a que realicen un prototipo?